15 de noviembre de 2011

Un problema tras otro...


Como venimos comentando en las últimas entradas, hace ya un par de semanas que nuestra mesa no se reune. Supongo que es algo que ocurre en todos los grupos de juego más o menos estable... pero hay que decir que el destino parece haberse empeñado en no dejarnos jugar. Manifestándose de innumerables formas, desde exámenes y cursos de fin de semana hasta comidas familiares, ha conseguido que resultase del todo imposible retomar nuestras aventuras a lo largo de la Marca...

Así pues, deseando poder retomar pronto la campaña, y teniendo especial esperanza en las futuras (y MUY esperadas) vacaciones de navidad, os traemos la crónica de nuestra última sesión de juego, parte de la cual se basa en una adaptación propia del módulo "¡Traición!", maquetado por nuestro amigo "El contemplador" para AelMdE. A pesar de no ser muy larga, ocurrieron un par de cosas de bastante importancia para el trasfondo de los personajes, y el final de la misma supuso un punto de inflexión a partir del cual, tocará tomar algunas decisiones respecto al futuro de la campaña...


Ser Roddrick
Les habían tendido una emboscada. La más simple y obvia de todas las posibles. Y sin embargo, habían caído en ella sin detectar el más mínimo atisbo de peligro. Rodeados por una veintena de hombres armados, el grupo escuchaba con impotencia las palabras del cabecilla de la banda. Especialmente interesado en las cabezas de los líderes orcos que los aventureros acababan de liquidar, no tardó en ofrecerles un trato; Ser Cedric le había pagado únicamente por conseguirlas, y les dejaría con vida si se las entregaban... Todo ocurrió muy deprisa. Un virote de la ballesta de Alexia surcó el aire para ensartarse en el cuello de uno de los atacantes. Pese a que ninguno de los dos bandos lo esperaba, la sorpresa fue mayor entre los bandidos, y en apenas unos segundos Agro y Egro se avalanzaron sobre sus enemigos espada en mano. Mientras amputaban miembros y cortaban gargantas, Alexia alcanzó en el ojo al cabecilla, haciendo que la mitad de bandidos huyeran hacia el bosque. Várvol durmió a media docena con unas simples palabras, y Milgram aplastó con su escudo el cráneo del hombre que había saltado sobre él. Tomando a uno de ellos como rehén, el grupo volvió a la fortaleza con la esperanza de hablar con Ser Roddrick. El castellano llevaba meses combatiendo a la banda que les acababa de asaltar, así que cualquier información que el prisionero pudiera aportar, sería bien recibida por el caballero.

Tras cobrar las recompensas por la banda y las tribus orcas, el grupo partió hacia un pinar cercano en el que, el antiguo maestro de Alexia habían sido visto por última vez. Según los rumores, un grupo de clérigos de aspecto sospechoso había llegado al castillo unos días atrás preguntando por él, y todo hacía indicar que le perseguían... Oscuro y apartado de los caminos, el pinar no tardaba en convertirse en un estrecho laberinto de vegetación y telarañas que impedía la buena visibilidad y dificultaba enormemente la marcha, y antes de que se dieran cuenta, el grupo había perdido de vista a Agro. Mientras lo buscaban, un grupo de arañas gigantes les atacó, sembrando todavía más la confusión y poniendo en peligro la vida de más de uno de los personajes, aunque el fuego y la cobardía de los arácnidos les ayudó a derrotarlo con facilidad. Pero solo un instante duró la tranquilidad... De entre los pinos, Agro reapareció con un cuerpo inherte entre los brazos. El cadáver de un hombre de mediana edad, ensangrentado y cubierto de telarañas, que vestía de forma similar a Alexia... Uno de los más famosos arqueólogos y caza-reliquias de toda la Marca, había sido brutalmente apuñalado y abandonado en aquél oscuro y olvidado bosque. Golpeando brutal e inesperadamente a su antigua pupila en lo más profundo de su alma...

Bronn, Caza-reliquias
Sumidos en el dolor de su compañera, el grupo volvió a la fortaleza con esperanza de descansar unos días antes de retomar la exploración de las minas, pero antes de haber cruzado si quiera sus puertas un encapuchado les abordó con rumores sobre el pasado de Várvol que captaron su atención. Al parecer, el misterioso viajero aseguraba que el mago había sido víctima del ataque de un hechicero conocido como "El Matamagos", que recorría la Marca acabando con todo aquél conocedor de la magia que se encontraba, arrebatándole sus libros, adquiriendo sus habilidades, y asimilando sus poderes. Según su historia, "El Matamagos" había querido acabar con el maestro de Várvol, apartándole a él del medio con un simple borrado de memoria al no encontrarle un verdadero reto para su poder... Además, el encapuchado les dijo que había oído rumores sobre la siguiente víctima del hechicero, cuya casa se encontraba en el bosque, cerca de la fortaleza. Sin pensarlo demasiado, el grupo partió hacia donde les había dicho el extraño personaje, y no tardaron en encontrar una antigua y destrozada cabaña en lo alto de un árbol. Al parecer, habían llegado tarde. El interior de la casa estaba sumida en el caos, como si un ejército entero la hubiera atravesado, registrándola en busca del más preciado de los tesoros. De pronto, dieron con una figura en el suelo. El cuerpo de un hombre yacía desplomado, ocultándose su cara bajo una capucha. Suponiendo lo peor, el grupo corrió en su ayuda, deseando no que no fuese demasiado tarde... Cuando el cuerpo desapareció, las puertas se cerraron, las luces se apagaron, y todos cayeron en el más profundo sueño...

Despertaron todos en una celda, encadenados a la pared. Desconocían dónde estaban y cuánto tiempo llevaban durmiendo. Tampoco sabían quién era el responsable de su captura... Pero eso no tardó en resolverse. Pasados unos minutos, la puerta se abrió, y una voz gélida y cargada de odio, muy bien conocida por los hermanos, les habló...

"Vaya, vaya... Parece que va a ser múltiple la satisfacción que saque de todo esto... En cualquier caso podré encargarme de vosotros dos más tarde... Tengo cosas más importantes en mente que la liquidación de ratas... ¡Aunque esas ratas me hayan sacado el ojo izquierdo!"

En ese momento, dos hombres corpulentos aparecieron a su lado, y pasó a hablarles a ellos...

"Traed a la chica. Empezaré por ella, el mago puede esperar... En cuanto a los demás, prepararlo todo para colgarlos... Pero no lo hagáis todavía. Quiero ver en persona como la muerte se los lleva..."

Sujetada por dos hombres, Alexia desapareció en la oscuridad del pasillo. A su lado, caminaba un hombre con el ojo izquierdo oculto tras un parche. Kletus, clérigo supremo de Velex, había vuelto a cruzarse en su camino...

Atrapados...
Como decía, una sesión corta en la que los personajes apenas adquirieron experiencia, pero marcada por un par de momentos de gran importancia en el devenir de sus respectivos trasfondos. Como narrador, la partida fue si cabe más importante, ya que supuso el punto y final a esa "introducción" de la primera parte de la que esperamos sea una larga campaña en la Marca. A partir de aquí, los jugadores van a tener un enemigo en común, así como un objetivo claro y concreto, por lo que les será mucho más fácil decidir por su cuenta los actos futuros. Sin quererlo, todos miran ya hacia la idea que tengo de desenlace. Y se dirigen hacia ella. Todos juntos. Unidos. Sin darse cuenta de que es solo una pequeña parte de lo que les depara el destino...

14 de noviembre de 2011

¡Ya queda menos!


¡Ya casi está aquí! ¡Cada vez queda menos para que podamos disfrutar de nuestra ansiada caja azul! Hoy, nuestros amigos de la Marca, nos muestran lo que será uno de los puntos fuertes de la misma... ¡El mapa! 


Los que me conocen, saben que siempre me han apasionado los mapas, y reconozco que la publicación que hoy nos ocupa es una de las que más impacientemente espero en los últimos años... Personalmente, me parece un trabajo increíble, muy en la línea del resto de material de la marca, y el hecho de que haya salido de las manos de nuestro adorado Manzanedo lo hace todavía más imprescindible en nuestra mesa... Por nuestra parte, ya tenemos claro que encargaremos dos cajas... ¡Ya queda menos!

11 de noviembre de 2011

Planes Oscuros... Planes de futuro.


¡Ya casi está aquí! Tras meses de inaguantable espera, podemos acceder a la preventa de "Planes Oscuros", la esperada segunda parte de la "Trilogía de la Orden del Libro". Esta será una aventura de mayor duración que su predecesora, con un marcado estilo "sandbox" que nos llevará a descubrir TODO el Gran Pantano de la Marca, y una ingente cantidad de información, opciones y ganchos de aventuras para nuestra mesa de juego.

Como era de esperar, nosotros ya nos hemos hecho con nuestro ejemplar, y contamos los días para empezar a leerlo y adaptarlo a nuestra campaña. Aunque esto no será demasiado difícil, ya que llevo tiempo pensando en ello y con toda probabilidad comenzaremos a jugarlo cuando terminemos con "La Fortaleza de la Frontera"...

"Planes Oscuros"
En otro orden de cosas, me frustra decir que no hemos podido jugar últimamente... Las razones son muchas y muy variadas, y hay que decir que han afectado a todos los miembros de la mesa, tanto a los jugadores como al narrador, y como casi suele pasar en estos casos, el no poder jugar no es culpa de nadie... Siempre nos queda pensar que las vacaciones están a la vuelta de la esquina, y entonces, sin tantas ocupaciones, no habrá menos de 2 o 3 partidas por semana...

!Pero no todo son malas noticias! Lo único positivo de no poder sentarnos a la mesa, es que tengo mucho más tiempo para pensar en el juego y en las futuras partidas... Por lo que es probable que de ahora en adelante alterne las crónicas de juego con otro tipo de artículos con monstruos, criaturas, anjs, o lugares de nuestra campaña que puedan servir a todo aquél que nos siga. Después de todo, ese es uno de los aspectos clave en el espíritu de la Marca. Que todos y cada uno de nosotros seamos sus habitantes. Que todos y cada uno de nosotros ayudemos a expandir sus fronteras...

4 de noviembre de 2011

Preparándonos...


Tras casi 15 días sin actualizar el blog en los que diversos asuntos han impedido que continuáramos nuestra campaña en la Marca, todo parece indicar que mañana volveremos a juntarnos para seguir nuestras andanzas por las minas abandonadas de la fortaleza del Gran Pantano... Como narrador, ya tengo preparadas todas las sesiones que quedan para acabar la parte de la campaña que se desarrollará en esta ubicación, así que espero que a partir de ahora todo marche con mayor velocidad y fluidez...

Mientras tanto, para dar unas leves señales de vida y confirmar que esto sigue en pie, os muestro los módulos que estoy leyendo y preparando para introducir más tarde o más temprano en nuestra campaña, siempre bajo el sistema de la Marca del Este:

"La Torre Maldita"

"Bajo la Torre Espiral"

"Las Ruinas de Bajomontaña"

"La Tumba de Abysthor"

En fin, ahora solo queda que todo esto llegue a buen puerto... Y que podamos contar aquí como disfrutamos jugándolos!

14 de octubre de 2011

Cadáveres y Caballeros.


Y por fin... ¡dos semanas seguidas escribiendo! Pues sí, así es. Volvemos tan solo una semana después con una nueva entrada de la crónica de nuestras partidas (de nuevo, otras dos sesiones) comenzando lo que esperamos sea el definitivo asentamiento del blog, así como del actual grupo de juego y la campaña que hemos empezado. Además, vamos a empezar a complementar las entradas con algo que siempre me ha encantado... ¡fotos de las partidas! Aunque sin abusar... Seguramente, no serán las mejores. Seguramente, me toque compensar a algún jugador con algún objeto especial por los caretos que voy a hacer públicos aquí. Pero es algo que siempre he querido hacer. Y desde que vi la primera entrada de este estilo en el blog de los amigos de La Marca del Este, he soñado con el momento en que yo pudiera hacer lo mismo... (De nuevo, que todo esto sea posible es solo gracias a ti... ♥)

"La Fortaleza de la Frontera"
En fin, que todo esto está muy bien, ¡pero vamos de una vez a lo que nos atañe! ¡El juego! Una vez concluidas esas primeras partidas que me había dejado de margen para aclimatarnos al sistema y la ambientación, comenzamos la verdadera campaña que confío ocupe nuestra mesa hasta, como mínimo, final de año. En líneas generales voy a basarme en el mítico módulo de OD&D para personajes de nivel básico "La Fortaleza de la Frontera", que recoge un entorno relativamente cerrado y limitado ideal para que los jugadores (y el narrador) comiencen a dar sus primeros pasos de libertad. Una fortaleza con todo lo que un aventurero puede necesitar, unas minas llenas de monstruos y tesoros, y la enorme posibilidad de introducir multitud de "ganchos" para enlazar con otras aventuras (muchas de las cuales ya tengo pensadas y se tratarán a su debido tiempo)... Y todo esto, con la firma del gran Gary Gygax. Diversión asegurada...


La Fortaleza de Ser Roddrick
Nada más cruzar las puertas de la fortaleza, el grupo se separó. Milgram, el clérigo, acudió a la capilla en busca de información, consejo y una cura para su mano amputada que no pudieron proporcionarle. A cambio, el sacerdote le rogó que investigaran el reciente robo de cadáveres en el cementerio cercano. Alexia, la ladrona, se dirigió a la posada del castillo, conocida como "El Viajero Risueño", buscando información sobre su antiguo maestro desaparecido, al que habían visto por última vez adentrándose en el cercano "Pinar de las Arañas". A su lado iba Várvol, el mago del grupo, que sin pasado ni recuerdos con los que orientarse, se sentó en la taberna a escuchar rumores que pudieran ayudarle. Por último, los dos guerreros hermanos, Agro y Egro, acudieron a las puertas de la ciudadela en busca de Ser Roddrick, pero este estaba muy ocupado arreglando los problemas que un grupo de bandidos estaba causando en la zona, por lo que los guardias les cerraron el paso, sugiriéndoles que se ganaran la audiencia librando a la región de los peligros que la asolaban. Así pues, tras hacer algunas compras y reponer provisiones, la mayoría del grupo abandonó la fortaleza en dirección al cementerio, dispuesto a investigar lo que estaba ocurriendo con los cadáveres. Solo Agro, cada vez más afectado por el malestar y las voces que inundaban su cabeza, tuvo que permanecer en la fortaleza.

Kobold de las Mina
A media noche, los aventureros llegaron al cementerio, descubriendo un grupo de kobolds saqueadores de tumbas del que se deshicieron sin problemas. Tan solo uno logró escapar... Hecho que aprovecharon los compañeros para seguirlo hasta su guarida y continuar la investigación. La criatura les guió hasta uno de los túneles de la antigua mina abandonada, donde encontraron una enorme tribu de kobolds a la que se enfrentaron. Allí descubrieron que la tribu almacenaba desde hace un tiempo fragmentos de cadáveres en una cámara fría... La razón se les escapaba, pero sin duda, aquél montón de cuerpos desmembrados habría de tener un fin siniestro y oscuro. Casi con toda seguridad, ideado por alguien más inteligente y poderoso que se aprovechase de ellos... Al llegar a la sala común de la guarida, perdonaron la vida a un grupo de unos 50 individuos, compuesto en su mayoría por "mujeres" y "niños", ya que a ninguno les pareció ético acabar con la vida de un puñado de seres indefensos y desarmados... De vuelta a la fortaleza, dispuestos a informar a cerca de lo descubierto a las autoridades, contemplaron sorprendidos como la multitud vitoreaba a un grupo de soldados que decían haber terminado con la banda de bestias que profanaba su cementerio... Degollando y quemando a más de 50 criaturas. Al frente de la compañía iba Ser Cedric, un pomposo y engreído caballero sin escrúpulos que solo buscaba impresionar a su ocupado padre... Ser Roddrick, señor del castillo.

Capitán Kenn
Entre la multitud, conocieron al capitán Kenn, jefe de la guardia de la fortaleza y primo de Ser Cedric, al cual detestaba enormemente y del que siempre sospechaba que conseguía las cosas de forma poco ética... Les sugirió que se adelantaran al próximo movimiento de Cedric, y acabaran con las dos tribus orcas también instaladas en las minas. De esta forma, cobrarían la recompensa, podrían ganarse la audiencia con Ser Roddrick, y asestarían un duro golpe al indeseable de su primo. De inmediato, y ya con Agro entre ellos, el grupo partió de nuevo rumbo a las minas, con intención de pasar la noche junto a ellas y adelantarse a los planes del caballero. Antes de amanecer, los aventureros se adentraron en la guarida de los orcos... Terminando con todos ellos con no demasiados problemas, y consiguiendo la cabeza de sus dos líderes, requisito indispensable para cobrar la recompensa en el castillo... Pero al salir les estaban esperando. Acompañado por una veintena de hombres, Ser Cedric trató de arrebatarles el trofeo, ofreciéndoles más del doble por cada cabeza, pero el grupo se mantuvo firme y, dando la espada al caballero, tomaron rumbo a la fortaleza...

... Pero no todo había acabado. A mitad de camino, un grupo de al menos quince bandidos les tendió una emboscada. Sorprendidos, escucharon las palabras que el cabecilla dedicaba a sus hombres entre carcajadas...

"Vaya, vaya... Después de todo el caballero se equivocaba... Sois mucho más estúpidos de lo que parecéis... ¡Muchachos! ¡Esta es el dinero más fácil que hemos ganado nunca!"

¡Primera foto de nuestra mesa!
En definitiva, fueron dos partidas muy divertidas, en la que los jugadores comenzaron a sentirse cómodos con la dinámica de exploración de mazmorras, afinaron el trabajo en equipo y su compenetración de grupo (a pesar de que uno de ellos faltase), y comprobaron la BRUTAL importancia de llevar siempre encima pociones de curación. Además, sirvió para que todos los personajes alcanzaran el nivel 2, el 3 en el caso de Alexia la ladrona, y para que consiguieran algo de tesoro y algún que otro objeto mágico. Pero sin duda, lo que más me gustó como narrador fue la inesperada importancia de Ser Cedric, diseñado como mero figurante, que pasó a ganarse el odio total del grupo y convertirse así en un genial enemigo para futuras partidas. Pero eso es algo que no contaremos hoy... ¿Quizá la semana que viene?

PD: Problemas con la conexión nos impiden mostrar más fotos... pero las habrá... prometido xD


10 de octubre de 2011

Ruinas en el Gran Pantano.


Después de un par de semanas en las que diversos motivos (desde los estudios y el trabajo hasta la falta de conexión a internet) nos han impedido jugar y actualizar, volvemos mañana al tajo con una nueva partida en la Marca del Este. Desde ahora, nuestra intención es la de jugar, y reseñar, al menos una partida a la semana... Aunque sabemos que no siempre será posible, y por tanto pedimos perdón a todo aquél que nos siga.

Así pues, retomamos la crónica de nuestras aventuras con las dos últimas partidas que jugamos, las cuales sirvieron además para terminar de presentar a todos los personajes que van a formar parte de la campaña que ahora comenzamos, y para asentar la base de la misma, que comenzará en forma de modelo “sandbox” a partir de mañana, como contaremos durante la próxima semana. Para enlazar con la futura trama principal, los aventureros terminarán con “El Enclave”, primera parte de la trilogía de “La Orden del Libro” publicada por Holocubierta, así como con la vieja torre en ruinas visirtaní descrita en el reglamento básico del juego. Por último, el camino les llevará a una vieja fortaleza, mítica entre todos los aficionados de las primeras ediciones de D&D, y que si todo marcha según lo planeado les tendrá ocupados, como poco, hasta final de año...

Acusados de herejes y conspiradores, Agro y Egro se adentraron en el Gran Pantano en busca del monasterio del que el malherido Rufus les había hablado. Según el viejo bibliotecario, estaba habitado por una antigua hermandad de monjes pacíficos aliada de la Orden, así que pusieron rumbo norte con la esperanza de encontrar entre sus muros algo de ayuda y consejo. Pero los clérigos de Velex seguían tras ellos, y no pasó mucho tiempo antes de que se encontraran con los primeros hombres de Kletus. Por fortuna, la gigantesca ciénaga hacía difícil seguir su rastro, así que consiguieron evitarlos y llegar al monasterio sin el menor sobresalto. Durante el trayecto, se toparon con un clérigo de Valion, de nombre Milgram, que investigaba una serie de rumores que hablaban de muertos vivientes y sectas adoradoras de Orcus en las inmediaciones del pantano. Cansado y perdido, no dudo en unirse a ellos con la esperanza de que le ayudasen en su cometido.


Aquella misma noche, mientras comían y descansaban en el más absoluto silencio, un terrorífico y repentino estallido terminó con la aparente paz que reinaba en el pantano. Era un sonido inquietante. Un retumbar que fue aumentando poco a poco en volumen e intensidad. Tambores. Tambores y cánticos tribales en una lengua que no habían escuchado nunca. En silencio, buscaron la fuente de aquél escándalo. Y así fue como encontraron el antiguo monasterio. Y a la tribu de Hombres-lagarto que ahora lo habitaban. De los monjes no había ni rastro. Allí no podía quedar nadie con vida... Estaban contemplando lo que parecía algún tipo de ritual de sacrificio. En el centro, sobre un altar cubierto de sangre, un hombre atado y desnudo, aparentemente inconsciente, centraba las miradas de todas aquellas criaturas. De entre ellas, surgió una figura ataviada de pieles y calaveras animales, que comenzó a dirigir el ritual mientras agitaba un cetro y bailaba como si estuviese en trance. De pronto, el silencio volvió. Y de la nada surgió una inmensa serpiente que comenzó a rodear al prisionero... Dispuesta a degustar la ofrenda que le brindaban. A partir de entonces, todo ocurrió muy deprisa. Una daga surcó el aire a toda velocidad, clavándose cerca de la cabeza de la serpiente, que emitió un sonido quejumbroso justo antes de abandonar el altar. El caos comenzó a reinar. Las criaturas corrían de un lado para otro, sin saber que hacer ni donde ir. Toda esta confusión se multiplicó cuando uno de ellos señaló a tres intrusos que se ocultaban tras la maleza. Y así comenzó la refriega. Por suerte, la mayoría trataron de refugiarse en las ruinas del monasterio cerrando las puertas tras de si... Por lo que los pocos que plantaron cara a los intrusos no tardaron en caer.  De entre las sombras, apareció una mujer maldiciendo por la daga que acababa de perder. Respondía al nombre de Alexia, y no dijo nada sobre el motivo que la había llevado hasta el monasterio. Una vez liberado, el prisionero se dio a conocer como Várvol. No tenía ningún tipo de recuerdo sobre su pasado, tan solo los dos conjuros que parecían haberse grabado en su mente. 

Durante el resto de la noche, el grupo se adentró en las ruinas del edificio, acabando con aquello que saliese a su paso. De todos, el peor parado fue Milgram, que perdió la mano en un combate con un gigantesco hombre-lagarto. Descubrieron que los monjes habían sido masacrados por un grupo de clérigos de Orcus que luego abandonaron la zona... Y que los reptiloides habían llegado a un lugar ya desierto y abandonado. Tras explorar las criptas, donde se toparon con una enorme gárgola, y descubrieron la tumba del fundador de la hermandad y de un antiguo caballero, Rufus decidió que aquél iba a ser el nuevo enclave de La Orden. Sin embargo, seguían necesitando ayuda, así que rogó al grupo que marcharan al norte, en busca de la fortaleza de Sir Roddrick, un antiguo y aliado caballero que podría ayudarles con dinero, armas, y hombres que defendieran el lugar. Los nuevos miembros del grupo, decidieron acompañarles, pues todos tenían razones, conocidas o no, para tomar el mismo camino...

Esa misma mañana pusieron rumbo norte, hacia la fortaleza. Casi en el linde de la enorme ciénaga, encontraron los restos de una antigua torre de vigilancia visirtaní. Alexia, que había pasado por el mismo lugar hace unos días, recordó haber visto un grupo de clérigos de Orcus entrando en la vieja torre. Así pues, encabezados por Milgram, se dispusieron a explorar las viejas ruinas. Tras acabar con un pequeño grupo de kobolds que custodiaban la entrada, el grupo descubrió en el piso inferior lo que parecía un laboratorio alquímico, en el que un grupo de clérigos hacían algún tipo de oscuros experimentos. Su lider, un clérigo visirtaní de nombre Kalamarûs, logró escapar en el último momento, maldiciendo a los aventureros y jurándoles que volverían a encontrarse... 

Antes de salir de la torre, desde la cual ya se divisaba la fortaleza de Ser Roddrick, en lo más profundo del nivel encontraron una cripta que contenía la tumba de un antiguo guerrero... De entre todo lo que encontraron destacaba una magnífica espada que Agro no dudó en ajustarse a la cintura... A pesar de las siniestras voces que comenzaron a llenar su cabeza desde entonces...


En general, fueron dos partidas rápidas, sencillas y lineales, con el principal objetivo de presentar e introducir a los tres personajes principales que faltaban (Milgram, Alexia y Várvol), en las que no hubo demasiados giros ni sobresaltos. El sistema ha resultado perfecto para el grupo. Todos los jugadores, incluso aquellos que nunca se habían sentado a una mesa de juego, se han adaptado rápido y sin problemas. Y el espíritu libre, intuitivo y “old school” de la Marca ha calado rápidamente entre ellos. Como mucho, resaltar un par de momentos en los que les permití gastar algún que otro punto de héroe para salvar la vida y seguir adelante... Pero creí conveniente darles un par de partidas tranquilas para empezar. Ya habrá tiempo para los nervios y el miedo a la muerte cuando comiencen a adentrarse en las Minas del Caos...

PD: Prometo que a partir de ahora las entradas serán más cortas y más llenas de fotos y dibujos... Pero necesitaba reunir todo lo jugado hasta ahora en una sola entrada para que no siguiera acumulándose el trabajo... xD

23 de septiembre de 2011

Fuego y Sangre.


Después de un largo periodo de sequía en nuestra mesa de juego, causado a partes iguales por la falta de tiempo y motivación, la necesidad de encontrar algún nuevo sistema de juego que nos atrapara y una ambientación que nos apeteciera explorar, llegó a nuestras manos una de las primeras cajas de "Aventuras en la Marca del Este". En seguida quedamos encantados con su sencillez y versatilidad, así que no pasó mucho tiempo hasta que una nueva campaña comenzase a forjarse en torno a nuestra mesa...

"El Enclave"
Como narrador del grupo, estuve gran parte del verano pensando en como comenzar la campaña. Me apetecía arrancar con un módulo definido y lineal, que no necesitase apenas cambios en lo referente al trasfondo y me permitiese centrarme en lo importante en una primera partida: familiarizar a los jugadores con el sistema y la nueva ambientación. Me decidí finalmente por "El Enclave", inicio de la "Trilogía de La Orden del Libro" y primera aventura oficial del juego, que reunía perfectamente todas las condiciones que buscaba para empezar... Así pues, con unos pequeños cambios en la trama, y los dos únicos jugadores (de momento) interpretando a sendos hermanos guerreros pertenecientes a la guardia de la Orden del Libro (Agro y Egro), nos adentramos en las calles de Robleda...


Cuando la compañía llegó, ya era demasiado tarde. El enclave se consumía bajo las llamas. Los adeptos morían a sus puertas ensartados por los seguidores de Velex. Desde lo alto del cadalso de la plaza, Kletus, nuevo clérigo supremo, dirigía la matanza y animaba a las masas... En un acto desesperado, Darren y sus hombres entraron en el edificio en busca de supervivientes, pero todo estaba ya perdido. Solo Rufus, bibliotecario de la Orden, se mantenía con vida inconsciente bajo un montón de escombros. De Mirta, la amante del capitán, no había rastro, y los cadáveres se acumulaban en los pasillo dificultando más si cabe el paso. Un derrumbe del techo obligó a la compañía a separarse, aislando a los hermanos Agro y Egro, que cargaban con Rufus, del resto de sus compañeros... Y fue precisamente eso lo que les salvó la vida. Tras encontrar una salida apenas utilizada en el lateral del edificio, presenciaron entre la multitud como los seguidores de Velex acababan con todos y cada uno de sus hermanos. Darren Valgayar fue apuñalado una docena de veces. Todavía con vida, pudo presenciar como Kletus, degollaba sin piedad a su amada Mirta... La Orden había sido destruida.


Acusados de herejes y conspiradores, declarados fugitivos, los dos hermanos salieron de Robleda amparados por la seguridad de la noche. Al cabo de unas horas, con Rufus ya despierto, decidieron poner rumbo al norte, hacia el gran pantano, en busca de un antiguo monasterio dirigido por monjes en su día aliados de la Orden... No tenían otro sitio a donde ir. Sin hogar. Sin amigos. Sin trabajo ni dinero... Solo eso les quedaba. Eso, y la sed de venganza. 


Kletus, Clérigo de Velex
En general, fue una primera partida rápida y muy divertida, que nos supo a poco y nos dejó con ganas de más. Cumplió de sobra la función de punto de partida para todo lo que vendría después, presentó perfectamente la ambientación y nos dio un montón de momentos para probar las diferentes mecánicas del sistema. Reconozco que en un primer momento me habría gustado que más jugadores hubieran participado, pero viendo como trascurrió la partida, y la evolución posterior de la campaña y los personajes, creo que todo fue perfecto para empezar.

"De entre todos los soldados de Robleda, Darren Valgayar era probablemente el que mayor fama tenía. Apenas superaba la veintena, y hacía tiempo que lideraba una de las compañías más importantes de la ciudad; la décima, encargada de patrullar y controlar toda la zona circundante al enclave principal de la Orden del Libro. Y todo el mundo sabía que aquél no era su verdadero techo, pues le habían ofrecido numerosos ascensos, y no pocas veces se habían fijado en él los cuerpos de guardia personal del Duque o el Burgomaestre. Nunca llegó a plantearse ninguno de esos cambios. Todos lo habrían apartado de lo único que amaba. Aquellos ojos. Aquellos ojos oscuros e inmensos. Mirta Rudiggi. Adepta de la Orden del Libro e hija del clérigo supremo de Velex..."


PD: Hay cosas que nunca cambian. La química entre Guille y Raul sostiene cualquier partida. Con jugadores así da gusto sentarse a la mesa... Ü

22 de septiembre de 2011

¡Rumbo al Este!

Después de más de un año en el que (nos) han pasado multitud de cosas que han impedido que el blog avanzara, volvemos a actualizar con lo que esperamos sea el comienzo de un proyecto duradero y constante. Nuestro grupo ha vuelto a reunirse con más ganas que nunca. ¡Incluso con más miembros! ¡Y además noveles en el mundillo!

Volvemos con las cosas más claras. Queremos hacer lo que nos gusta. Y contarlo. Ni más, ni menos. Tratar de difundir esta pasión que compartimos todo el grupo. Lograr que otros sientan esas ganas locas por adentrarse en un dungeon sin fondo. Encontrar el mayor tesoro jamás visto. Esquivar todas las trampas. Acabar con toda criatura que se interponga entre nosotros y la satisfacción de sentirnos héroes. Queremos disfrutar todos juntos. Queremos lanzar el dado y aguantar la respiración esperando ese 20 que nos hace saltar de alegría. Queremos reírnos cuando ese amigo con tan mala suerte vuelve a sacar un 1. Queremos que las horas pasen y pasen sin darnos cuenta. Hacer fotos de las partidas. Escribir un diario de campaña... Queremos divertirnos. Y que la gente lo vea. Y que se vea contagiada por esas mismas ganas. Queremos jugar al rol. Y tenemos muy claro como y con qué.


Señoras. Señores. La Marca nos espera...

¡Rumbo al Este!


... Y todo esto es gracias a ti. Todo. Aunque no me creas. Aunque no llegues ni a entender por qué.

... Te debo mucho. Muchísimo. Y solo pienso cada día en poder devolverte la mitad de lo que me has dado.

... Ily. Ily infinito.